Cada día, la limpieza de comunidades en Madrid se convierte en un elemento fundamental de la demostración de compromiso por parte de los propietarios, en pro de una adecuada convivencia y la sensación de vivir en espacios comunes limpios y agradables.
Tal como lo exige la ley vigente, son de carácter obligatorio una serie de actuaciones que soliciten los propietarios o exijan las administraciones públicas en materia de conservación y accesibilidad de los inmuebles.
Según recoge la legislación de la Comunidad de Madrid, son obligatorios “los trabajos y las obras necesarias para el adecuado mantenimiento y cumplimiento del deber de conservación del inmueble y de sus servicios e instalaciones comunes”.
Estas zonas comunes incluyen todas aquellas que sean necesarias para cumplir con los requisitos básicos de seguridad, limpieza, habitabilidad y accesibilidad.
En la Ley 38/1999 de 5 de noviembre o Ley de Ordenación de la Edificación se establece como obligación de los propietarios conservar en buen estado la edificación mediante un adecuado uso y mantenimiento; y como obligación de los usuarios, sean o no propietarios, la utilización adecuada de los edificios o de parte de los mismos de conformidad con las instrucciones de uso y mantenimiento.
Los expertos en el tema entregan una serie de recomendaciones para que propietarios y usuarios refuercen su compromiso en la limpieza de comunidades de Madrid:
- Siempre que sea posible, no dejar puertas abiertas para evitar que entre suciedad y polvo del exterior.
- Tener limpios elementos ornamentales.
- Se debe prestar especial atención a los suelos y a la higienización de los ascensores.
- Darle prioridad también a las zonas acristaladas, eliminando las huellas por contacto y que queden limpias y brillantes.