Una empresa de limpieza que se hace cargo de un supermercado tiene que tener una experiencia sólida y profesional. No en vano se juega con productos de alimentación que pueden tener repercusiones graves en la salud de la población, si no se tratan de forma adecuada.
En este sentido, hay varios aspectos que una empresa de limpieza debe tener en cuenta a la hora de llevar a cabo su labor:
- Limpieza de lineales: Los lineales y demás superficies sobre las que se colocan los productos deben permanecer completamente limpias. Para ello es importante limpiarlas antes de reponer los productos, mantener la limpieza, y en caso de derrame de alimentos, la limpieza tiene que ser inmediata, para evitar malos olores y la proliferación de plagas.
- Limpieza de suelos: Los supermercados son establecimientos con mucho tránsito de personas, y eso se nota en los suelos. Un suelo limpio y bien mantenido dará al supermercado una buena imagen, así como percepción de limpieza y cuidado con los productos que vende. En caso de derrame de algún producto, la limpieza debe ser inmediata, para evitar accidentes, además de malos olores y las ya mencionadas e indeseadas plagas. En las grandes superficies (hipermercados), se hace fundamental el uso de máquinas fregadoras, que mantengan los suelos en perfecto estado de limpieza, de forma continua.
- Limpieza de cristales: Los cristales de puertas de entrada, escaparates, etc. deben ser limpiados por profesionales con la frecuencia necesaria. De esta forma, se evitará que se acumulen restos de productos en los cristales, así como huellas y manchas, que empañan la imagen del supermercado.